Los ojos de Charcot
desde la perspectiva de Edith Vázquez


Descubre cómo fue la construcción del proyecto realizado

Texto de Isabel Morales Bonilla

A través del Sistema de Apoyos a la Creación y Proyectos Culturales, un equipo de trabajo y colaboradores, la artista interdisciplinaria Edith Vázquez presenta “Los ojos de Charcot” una mirada contemporánea a la iconografía de la Histeria Femenina, en La Antigua Academia de San Carlos.

Una experiencia inmersiva determinada por ritmos dentro de las composiciones, ritmos globales: en la imagen, diseño, sonido, color, movimiento, y en el diseño del espacio, pero ¿cómo es abordado?

Fotografías: Gisell G.M.

Primeramente, la Histeria se consideraba una enfermedad física, crónica y nerviosa meramente asociada a la mujer, en el siglo XIX.

El auge de la fotografía se da en la misma época, y Jean-Martin Charcot, neurólogo con residencia en el Hospital de La Salpêtrière documentaba a las mujeres diagnosticadas con dicho trastorno.

Para Edith, la Histeria convoca al diálogo de la iconografía, fotografía e Historia del arte, por ello, cuando descubre las fotografías de Charcot, se interesó por indagar en el papel que juega la mujer para la legitimación de algunos pensamientos en torno a la identidad femenina.

Los ojos de Charcot surge a partir de que Edith se interesa por las pasiones humanas y se encuentra con el tema de la Histeria, así surge su tema de Maestría, con residencia en Torino, posteriormente Paris, lugar en donde recaba las imágenes del archivo histórico del Hospital de La Salpêtrière, mismas que son proyectadas en su obra.

La inmersión de su pieza significa ver las imágenes en su deconstrucción a partir de un sistema que ella misma desarrolló en su estancia posdoctoral: “Pantallas nulas por refracción”, con el cual, trabaja desde un punto técnico y conceptual, con un tratamiento matemático, de observación y descomposición, para así, ver la imagen a través de partículas.

Cuando realiza el Doctorado se especializa en Óptica y Luz, y en el estudio científico de esta para generar imágenes, de ahí la idea de fusionar arte, ciencia y tecnología.

Es hasta el Posdoctorado cuando retoma los temas trabajados y se aproxima al diseño de las piezas inmersivas a partir de la escena, movimiento e impacto. Así, hasta que llega a la propuesta de reconfigurar fotografías, entrando en su composición, basándose en la idea conceptual de ir hasta el fin de las cosas.

A través de la pieza se es testigo de la indagación muy profunda de las imágenes e ideas generadas preconcebidas en torno al cuerpo de la mujer histérica.

Es fundamental tener en cuenta las reflexiones en torno a cómo se ha escrito nuestra historia; el imaginario colectivo en torno a la mujer histérica sigue vigente, por ello, es un dialogo que se debe continuar desde mi punto de vista como mujer y artista.

Acércate a La Antigua Academia de San Carlos y visita el proyecto vigente hasta el 6 de abril.